La vida cristiana se trata de una relación con Jesucristo. Y en el corazón de esa relación hay una invitación que Jesús extiende a todas las personas con cualquier experiencia de vida: “Sígueme”.
La vida cristiana se trata de una relación con Jesucristo. Y en el corazón de esa relación hay una invitación que Jesús extiende a todas las personas con cualquier experiencia de vida: “Sígueme”.